Piedras naturales semipreciosas y preciosas de maravillosos colores y formas caprichosas: Aguamarinas, amatistas, esmeraldas, zafiros, diamantes… Desde Joyería M Seoane vamos a comentar algunas “curiosidades” sobre estas gemas tan llenas de simbolismo y tan apreciadas y utilizadas en Joyería. Estamos prácticamente en verano y con el calor llegan también los colores vivos y alegres en vestidos y toda clase de complementos. Por supuesto también en las joyas se aprecia más en esta época estival el gusto por el color. Hoy hablaremos de la aguamarina y de la amatista.
Aguamarina: Es “hermana” de la esmeralda ya que las dos son berilos con la misma dureza, siete y medio en la escala de Mohs. Hoy en día los diseñadores actuales la consideran una de sus favoritas tanto por su amplia gama de colores (desde el azul claro, al turquesa y verde oscuro) como por su gran belleza y dureza. Ésta favorece la diversidad de tallas proporcionando un gran surtido en formas para su uso en joyería.
Es la piedra amuleto de los marineros y viajeros (“agua y mar”) contra el mareo y las tempestades. En la antigüedad estos creían que con ella se aseguraban el regreso a casa sin contratiempos. También se la consideraba protectora de la salud y símbolo de pureza. En el antiguo Egipto, el filósofo Hermes Trimegisto afirmaba que la piedra Aguamarina hacía feliz y rico a quien la llevaba. Produce paz y sosiego; Fortalece el coraje, ahuyenta miedos y clarifica la mente. Parece pues que su influencia es altamente positiva.
Amatista: Es la variedad de cuarzo más apreciada. Dureza siete y color desde el violeta pálido al púrpura fuerte. Se valora como piedra semipreciosa por la rareza de sus piedras de alta calidad. En todos los tiempos ha sido muy apreciada y utilizada; en el antiguo Egipto se usaba para crear joyas, sellos personales y tallas. Hoy en día en joyería es una de las gemas más demandadas por su belleza y color.
Simboliza la sabiduría divina y por ello es poderosa y protectora. Se considera una de las piedras más espirituales: Ayuda a la meditación y favorece la armonía; Calma las emociones violentas, neutraliza la negatividad; Favorece la intuición y la inspiración. Incluso afirman que alivia en momentos de sufrimiento y consuela en el dolor. De una forma u otra el tener esta gema cerca nos va a resultar beneficioso. Las piedras naturales además de deleitarnos con su belleza, van a dar con su energía fuerza y vigor a nuestras vidas.
(info. inspirada en espiritugaia.com)